Conceptos claves:
Decadencia de la monarquía hispánica
Disputa Europea en el caribe
Congreso de Ciencias Sociales**
Clases meet
Durante las clases meet, continuaremos la revisión de los infográficos uno por uno, para el aprovechamiento de todo el equipo.
Clases no meet:
Durante esta semana estaremos llevando a cabo el primer congreso de Ciencias Sociales: Tecnología y Ciencias Sociales. Les invito a inscribirse en el siguiente link para la ponencia que les interese, luego del congreso estemos teniendo algunas reflexiones y evaluaciones a partir de las ponencias allí presentadas.
https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLScwatYVkvp7EeGAKI8fA-oUyfyHH8_6AFS30cbPKvvV8bBMyw/viewform?usp=sf_link
Sobre lo anterior, estaremos dando más detalle en clases y en los grupos de whatsapp.
Por otro lado, continuamos abordando el segundo tema de la unidad llamado: "La decadencia de la Monarquía Hispánica" y las disputas europeas en el Caribe. Les motivo a leer la página 4 de su Guía de actividades (la que le entregaron físicamente el equipo de dirección). Y a partir de la lectura:
- Piensa en grupo cómo agregar dicha información a sus infografías
- Toma nota de algunos detalles que te gustaría discutir en clases
- Escribe preguntas para investigar o profundizar más adelante
Les estaré adjuntando la guía de actividades en este correo, tambien les dejo la lectura de esta semana.
RECUERDA: Subir el segundo borrador del infográfico a la carpeta compartida en el grupo.
Siempre a la orden,
TEMA II: LA DECADENCIA DE LA MONARQUÍA HISPÁNICA Y LA DISPUTA EUROPEA DEL CARIBE Y AMÉRICA
El Imperio hispánico, tuvo un período de apogeo relativamente corto (apenas duró cien años) y un proceso de decadencia continuada durante siglos, hasta que en 1898 se perdieron las últimas posesiones de ultramar. Los reinados de Carlos I y Felipe II, los conocidos como Austrias mayores, fueron el cenit del poder español en el mundo. Sus sucesores, con más o menos fortuna, intentaron preservar la herencia que habían recibido, aunque fueron paulatinamente perdiendo la autoridad y prestigio ante sus homólogos europeos. El avispero de las Provincias Unidas y una Hacienda insostenible fueron las principales causas del declive, hasta llegar al reinado de Carlos II, antesala del siglo XVIII, con las diferentes naciones repartiéndose las posesiones españoles incluso antes de que falleciese el monarca.
En este agónico proceso de ascenso y caída de la Monarquía Hispánica hay varias fechas reseñables, verdaderos puntos de inflexión en su historia: en 1648 se firma el Tratado de Westfalia, que reconoce la independencia de las Provincias Unidas; en 1659 el Tratado de los Pirineos, que alza a Francia como nueva gran potencia europea; en 1668, mediante el Tratado de Lisboa, se reconoce la independencia de Portugal tras ochenta años de unión a la Corona española; y en 1714 se firma el Tratado de Utrecht que pone fin a la Guerra de Sucesión española y supone la pérdida de las posesiones hispanas en Europa.
La mayoría de estas fechas están relacionadas con acuerdos diplomáticos, cuyos objetivos no fueron otros que poner por escrito la realidad que había arrojado el campo de batalla. El Imperio español se iba apagando poco a poco, algo que aprovecharon los demás estados para ir privándole de sus territorios a la mínima oportunidad.
El Tratado de Utrecht, que en realidad no es un texto único sino diversos acuerdos bilaterales y multilaterales firmados entre 1713 y 1715 por los implicados en la Guerra de Sucesión española, acabó por arruinar la autoridad de la Monarquía Hispánica en el continente. España, que actuó durante casi todas las negociaciones bajo la tutela de Francia, perdió sus posesiones en Centroeuropea e Italia, y conservó tan solo (lo que no era poco) sus territorios de Ultramar. A escala europea, el resultado fue un precario sistema de equilibrios, en el que se intentaba que ni Francia, ni el Imperio adquiriesen un desmesurado poder.
El resultado acabó por no contentar a nadie (es más, el Imperio y la España borbónica no firmarían la paz hasta diez años después), salvo a Inglaterra, la gran beneficiada, en especial, en materia comercial y económica. La guerra por la corona española, que se extendió por todo el planeta y bien podría ser calificada como guerra mundial, terminó en tablas y con una solución de compromiso. Aun así, trajo consigo un período de paz que no se rompería, salvo por conflictos menores, durante varias décadas. (Joaquim Alvadera: El declive de la Monarquía y del Imperio español. Los Tratados de Utrecht (1713-1714)
Desde el siglo xvi, el Caribe fue, reiteradamente, foco de la confrontación entre las principales potencias. En las décadas posteriores a la expansión de España, sus posesiones fueron disputadas por holandeses, ingleses y franceses.
Francia, en el transcurso del siglo xvii, conquistó las islas de Saint Christopher, Saint Croix, San Bartolomé, Grenada, San Martín, Tortuga, Guadalupe, Martinica, la parte oeste de La Española –que se llamó Santo Domingo (Haití)– y la Guayana Francesa. Al norte del Caribe, al este de la costa canadiense, el archipiélago en que se encuentran San Pedro y Miquelón.
Las principales colonias británicas fueron Jamaica, Trinidad-Tobago, Barbados, Antigua Barbuda, Santa Lucía, San Kitts-Nevis, Montserrat y Anguila y, finalmente, los territorios continentales de Belice y Guyana. En estos dos últimos existen disputas territoriales pendientes con los países latinoamericanos vecinos.
El reino de Holanda dominó: San Eustaquio, Saba, San Martín y las conocidas como islas ABC: Aruba, Bonaire y Curaçao. En el continente, entre la Guayana francesa y la inglesa, los holandeses impusieron su control sobre Surinam en el siglo xix.
Video Recomendado: https://www.youtube.com/watch?v=mYYDfxTZIEI&feature=youtu.be
lectura recomendada: https://metahistoria.com/novedades/los-tratados-de-utrecht-1713-1714/
Ana Reyes
Coordinadora de Área - Ciencias Sociales
Profesora Ciencias Sociales 3er grado
Liceo Científico Dr. Miguel Canela Lázaro
Prov. Hermanas Mirabal, Rep. Dominicana
Decadencia de la monarquía hispánica
Disputa Europea en el caribe
Congreso de Ciencias Sociales**
Clases meet
Durante las clases meet, continuaremos la revisión de los infográficos uno por uno, para el aprovechamiento de todo el equipo.
Clases no meet:
Durante esta semana estaremos llevando a cabo el primer congreso de Ciencias Sociales: Tecnología y Ciencias Sociales. Les invito a inscribirse en el siguiente link para la ponencia que les interese, luego del congreso estemos teniendo algunas reflexiones y evaluaciones a partir de las ponencias allí presentadas.
https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLScwatYVkvp7EeGAKI8fA-oUyfyHH8_6AFS30cbPKvvV8bBMyw/viewform?usp=sf_link
Sobre lo anterior, estaremos dando más detalle en clases y en los grupos de whatsapp.
Por otro lado, continuamos abordando el segundo tema de la unidad llamado: "La decadencia de la Monarquía Hispánica" y las disputas europeas en el Caribe. Les motivo a leer la página 4 de su Guía de actividades (la que le entregaron físicamente el equipo de dirección). Y a partir de la lectura:
- Piensa en grupo cómo agregar dicha información a sus infografías
- Toma nota de algunos detalles que te gustaría discutir en clases
- Escribe preguntas para investigar o profundizar más adelante
Les estaré adjuntando la guía de actividades en este correo, tambien les dejo la lectura de esta semana.
RECUERDA: Subir el segundo borrador del infográfico a la carpeta compartida en el grupo.
Siempre a la orden,
TEMA II: LA DECADENCIA DE LA MONARQUÍA HISPÁNICA Y LA DISPUTA EUROPEA DEL CARIBE Y AMÉRICA
El Imperio hispánico, tuvo un período de apogeo relativamente corto (apenas duró cien años) y un proceso de decadencia continuada durante siglos, hasta que en 1898 se perdieron las últimas posesiones de ultramar. Los reinados de Carlos I y Felipe II, los conocidos como Austrias mayores, fueron el cenit del poder español en el mundo. Sus sucesores, con más o menos fortuna, intentaron preservar la herencia que habían recibido, aunque fueron paulatinamente perdiendo la autoridad y prestigio ante sus homólogos europeos. El avispero de las Provincias Unidas y una Hacienda insostenible fueron las principales causas del declive, hasta llegar al reinado de Carlos II, antesala del siglo XVIII, con las diferentes naciones repartiéndose las posesiones españoles incluso antes de que falleciese el monarca.
En este agónico proceso de ascenso y caída de la Monarquía Hispánica hay varias fechas reseñables, verdaderos puntos de inflexión en su historia: en 1648 se firma el Tratado de Westfalia, que reconoce la independencia de las Provincias Unidas; en 1659 el Tratado de los Pirineos, que alza a Francia como nueva gran potencia europea; en 1668, mediante el Tratado de Lisboa, se reconoce la independencia de Portugal tras ochenta años de unión a la Corona española; y en 1714 se firma el Tratado de Utrecht que pone fin a la Guerra de Sucesión española y supone la pérdida de las posesiones hispanas en Europa.
La mayoría de estas fechas están relacionadas con acuerdos diplomáticos, cuyos objetivos no fueron otros que poner por escrito la realidad que había arrojado el campo de batalla. El Imperio español se iba apagando poco a poco, algo que aprovecharon los demás estados para ir privándole de sus territorios a la mínima oportunidad.
El Tratado de Utrecht, que en realidad no es un texto único sino diversos acuerdos bilaterales y multilaterales firmados entre 1713 y 1715 por los implicados en la Guerra de Sucesión española, acabó por arruinar la autoridad de la Monarquía Hispánica en el continente. España, que actuó durante casi todas las negociaciones bajo la tutela de Francia, perdió sus posesiones en Centroeuropea e Italia, y conservó tan solo (lo que no era poco) sus territorios de Ultramar. A escala europea, el resultado fue un precario sistema de equilibrios, en el que se intentaba que ni Francia, ni el Imperio adquiriesen un desmesurado poder.
El resultado acabó por no contentar a nadie (es más, el Imperio y la España borbónica no firmarían la paz hasta diez años después), salvo a Inglaterra, la gran beneficiada, en especial, en materia comercial y económica. La guerra por la corona española, que se extendió por todo el planeta y bien podría ser calificada como guerra mundial, terminó en tablas y con una solución de compromiso. Aun así, trajo consigo un período de paz que no se rompería, salvo por conflictos menores, durante varias décadas. (Joaquim Alvadera: El declive de la Monarquía y del Imperio español. Los Tratados de Utrecht (1713-1714)
Desde el siglo xvi, el Caribe fue, reiteradamente, foco de la confrontación entre las principales potencias. En las décadas posteriores a la expansión de España, sus posesiones fueron disputadas por holandeses, ingleses y franceses.
Francia, en el transcurso del siglo xvii, conquistó las islas de Saint Christopher, Saint Croix, San Bartolomé, Grenada, San Martín, Tortuga, Guadalupe, Martinica, la parte oeste de La Española –que se llamó Santo Domingo (Haití)– y la Guayana Francesa. Al norte del Caribe, al este de la costa canadiense, el archipiélago en que se encuentran San Pedro y Miquelón.
Las principales colonias británicas fueron Jamaica, Trinidad-Tobago, Barbados, Antigua Barbuda, Santa Lucía, San Kitts-Nevis, Montserrat y Anguila y, finalmente, los territorios continentales de Belice y Guyana. En estos dos últimos existen disputas territoriales pendientes con los países latinoamericanos vecinos.
El reino de Holanda dominó: San Eustaquio, Saba, San Martín y las conocidas como islas ABC: Aruba, Bonaire y Curaçao. En el continente, entre la Guayana francesa y la inglesa, los holandeses impusieron su control sobre Surinam en el siglo xix.
Video Recomendado: https://www.youtube.com/watch?v=mYYDfxTZIEI&feature=youtu.be
lectura recomendada: https://metahistoria.com/novedades/los-tratados-de-utrecht-1713-1714/
Ana Reyes
Coordinadora de Área - Ciencias Sociales
Profesora Ciencias Sociales 3er grado
Liceo Científico Dr. Miguel Canela Lázaro
Prov. Hermanas Mirabal, Rep. Dominicana