Buenos días,
Estoy seguro que muy pocos imaginaron que el último día de clases de forma presencial y normal desde los inicios del Liceo iba a ser ese jueves 12 de marzo. Regocijados por un fin de semana largo que regularmente por las particularidades de nuestro liceo, no era normal que ocurriera. Ese fin de semana largo no ha concluido todavía.
Desde la semana siguiente a ese jueves y hasta ahora, hemos estado tratando de hacer lo mejor que se ha podido, para que la enseñanza de calidad que pregonamos se mantenga y el tiempo en casa se aproveche de la mejor manera.
Probablemente ahora estamos cómodos en casa (sé que no todos tenemos esa posibilidad), en pantalones cortos, sin uniforme (ayayayay, cuantos disgustos me provocaron con eso), con la posibilidad de dormir un poco más, sin tener que verle la cara de a los que vivimos jodiendo para que ustedes hagan lo que tiene que hacer y muchas cosas mas que ustedes saben que yo se que sabemos, todo eso que estando en el Liceo lo pedían a gritos.
Al día de hoy, han pasado 2 meses y 8 días desde ese último día, todavía no sabemos cuándo iniciará. No se si ustedes piensan como yo, en mi caso, desde ese viernes 20 de diciembre (saquen la cuenta ustedes), en el que me paré frente a todos y les dije que era mi último día, no he dejado de pensar en el día que volveré, no he dejado de pensar en hacer todo lo que no pude hacer mientras estuve con ustedes, no he dejado de pensar en que probablemente no aproveché estar con ustedes al máximo. Debo resaltar que no estoy seguro de cuándo será, pero si les digo que quiero prepararme para cuando llegue ese día.
Esto nos deja un mensaje, un mensaje que ya lo hemos comentado. La mayoría de las veces nos dejamos llevar de la rutina, no apreciamos los detalles, no le damos importancia a lo positivo, en fin, no vemos la parte bonita de todo lo que está ocurriendo a nuestro alrededor. Cada acción que realicemos, cada situación que se nos presente, tendrá su parte positiva y su parte negativa, dependiendo de cómo lo veamos. Tratemos de aprender siempre de todo, de lo que consideramos bueno y también de lo que consideramos malo.
Tal vez no compartimos lo suficiente con esa persona que estaba a nuestro lado y puede que ahora extrañamos a esa persona, tal vez no aproveché el tiempo correctamente y ahora quisiera hacer eso que no hice. El pasado no lo podemos cambiar, pero sí podemos hacer lo necesario ahora en el presente para tener un mejor futuro, analicemos y reflexionemos sobre lo que hemos hecho.
Les invito a que se preparen para el regreso, que piensen en ello.
Aprovecho la oportunidad para decirles que hagan un esfuerzo por respetar el trabajo que se ha venido realizando con ustedes desde que inició toda esta crisis sanitaria. Los profes, personal administrativo y toda la comunidad del Liceo no ha parado y la única razón que los mueve es la educación de ustedes, por y para ustedes. (al que le sirva el sombrero, que se lo ponga)
Espero que estén muy bien, siempre pienso mucho en todos ustedes, y bueno, si ustedes saben contar, pues sepan que pueden contar conmigo.
Sexto, ¿tienen algo que decir?, ¿quinto?, ¿cuarto?, ¿los profes allá atrás?,
Alto, alto, solo les digo, podemos pasar la mañana cantando el himno, o lo volvemos a hacer a las 4:00 pm cuando salgan, ustedes deciden.
Allaaaaa, quítate el abrigo de la cabeza, guarda esa gorra, descruza los brazos, una posición de respeto...
Himno Nacional, 1 - 2 - 3....
Ucinio Antonio Morel Pérez
Estoy seguro que muy pocos imaginaron que el último día de clases de forma presencial y normal desde los inicios del Liceo iba a ser ese jueves 12 de marzo. Regocijados por un fin de semana largo que regularmente por las particularidades de nuestro liceo, no era normal que ocurriera. Ese fin de semana largo no ha concluido todavía.
Desde la semana siguiente a ese jueves y hasta ahora, hemos estado tratando de hacer lo mejor que se ha podido, para que la enseñanza de calidad que pregonamos se mantenga y el tiempo en casa se aproveche de la mejor manera.
Probablemente ahora estamos cómodos en casa (sé que no todos tenemos esa posibilidad), en pantalones cortos, sin uniforme (ayayayay, cuantos disgustos me provocaron con eso), con la posibilidad de dormir un poco más, sin tener que verle la cara de a los que vivimos jodiendo para que ustedes hagan lo que tiene que hacer y muchas cosas mas que ustedes saben que yo se que sabemos, todo eso que estando en el Liceo lo pedían a gritos.
Al día de hoy, han pasado 2 meses y 8 días desde ese último día, todavía no sabemos cuándo iniciará. No se si ustedes piensan como yo, en mi caso, desde ese viernes 20 de diciembre (saquen la cuenta ustedes), en el que me paré frente a todos y les dije que era mi último día, no he dejado de pensar en el día que volveré, no he dejado de pensar en hacer todo lo que no pude hacer mientras estuve con ustedes, no he dejado de pensar en que probablemente no aproveché estar con ustedes al máximo. Debo resaltar que no estoy seguro de cuándo será, pero si les digo que quiero prepararme para cuando llegue ese día.
Esto nos deja un mensaje, un mensaje que ya lo hemos comentado. La mayoría de las veces nos dejamos llevar de la rutina, no apreciamos los detalles, no le damos importancia a lo positivo, en fin, no vemos la parte bonita de todo lo que está ocurriendo a nuestro alrededor. Cada acción que realicemos, cada situación que se nos presente, tendrá su parte positiva y su parte negativa, dependiendo de cómo lo veamos. Tratemos de aprender siempre de todo, de lo que consideramos bueno y también de lo que consideramos malo.
Tal vez no compartimos lo suficiente con esa persona que estaba a nuestro lado y puede que ahora extrañamos a esa persona, tal vez no aproveché el tiempo correctamente y ahora quisiera hacer eso que no hice. El pasado no lo podemos cambiar, pero sí podemos hacer lo necesario ahora en el presente para tener un mejor futuro, analicemos y reflexionemos sobre lo que hemos hecho.
Les invito a que se preparen para el regreso, que piensen en ello.
Aprovecho la oportunidad para decirles que hagan un esfuerzo por respetar el trabajo que se ha venido realizando con ustedes desde que inició toda esta crisis sanitaria. Los profes, personal administrativo y toda la comunidad del Liceo no ha parado y la única razón que los mueve es la educación de ustedes, por y para ustedes. (al que le sirva el sombrero, que se lo ponga)
Espero que estén muy bien, siempre pienso mucho en todos ustedes, y bueno, si ustedes saben contar, pues sepan que pueden contar conmigo.
Sexto, ¿tienen algo que decir?, ¿quinto?, ¿cuarto?, ¿los profes allá atrás?,
Alto, alto, solo les digo, podemos pasar la mañana cantando el himno, o lo volvemos a hacer a las 4:00 pm cuando salgan, ustedes deciden.
Allaaaaa, quítate el abrigo de la cabeza, guarda esa gorra, descruza los brazos, una posición de respeto...
Himno Nacional, 1 - 2 - 3....
Ucinio Antonio Morel Pérez