
Columna publicada en la seccion "Aula Democratica" en el Periodico El Caribe
Lunes 3 de noviembre de 2014
¿De qué manera podemos, cómo educadores, desarrollar espacios de convivencia social? Ese artículo quiere brindar una respuesta concreta, presentando una experiencia de educación cívica implementada en el Liceo Científico Miguel Canela Lázaro de la provincia Hermanas Mirabal.
Esta escuela, desde la fecha de su nacimiento (enero 2012), ha creado un órgano institucional democrático constituido por los mismos estudiantes, un consejo dotado de poder decisional y organizativo.
Como ha sido descrito por algunos de su integrantes: “Nuestro consejo está constituido por veintisiete estudiantes, elegidos entre los grupos académicos a través de una votación. Sin embargo, los representantes tienen que cumplir dos requisitos básicos: ser estudiantes sobresalientes y mostrar capacidades de liderazgo. El consejo tiene también una directiva compuesta por un presidente, un vicepresidente, un tesorero, un secretario y, por último, tres vocales”.
El consejo estudiantil del Liceo se encarga de la venta de mantecas y golosinas con el objetivo de recaudar fondos para planificar fiestas estudiantiles, noches de cine, representaciones de la escuela en actividades, foros y talleres públicos, organizar actividades o viajes culturales y ecológicos, conferencias.